Esto es una historia corta fan fiction Voy a empear a escribir historias de este tipo. Se pueden situar en cualquier momento, este se situa durante las Guerras Clon. Vamos a hablar del general separatista Ruman Bleiz, un héroe de guerra, pese a servir a los "malos". Evitó el genocidio de millones de civiles inocentes a manos de la República. Vamos a por ello:
Rados, un planeta del Borde Extrior muy cercano a Raxus, la sede del gobierno separatista. Este planeta se unió a la República 250 Años Antes de la Batalla de Yavin, para separarse en el 30 ABY. ¿El motivo? La República apenas observaba el borde Exterior. Como miembro de la República, debía pagar una cuota anual altísima en créditos el gobierno planetario. En el 35 ABY, hubo una crisis política en Rados de niveles estratosféricos. El Gobernador de Rados, un anciano con experiencia militar, se vio envuelto en un escándalo a niveles personales. La oposición entonces propuso una moción de censura, que acabó dejando al planeta sin gobierno, y con una fuerte crisis económica. Por mucho que se intentó, la oposición no se logró poner de acuerdo en el gobierno, y después de varias elecciones fallidas, la crisis debastó aún más el planeta, y pese a que se pidió ayuda a la República, esta no respondió. Sin embargo, la cosa pareció solucionarse cuando finalmente un joven político de no más de 30 años consiguió hacer campaña y alcanzar la mayoría absoluta, pero dos mese después de convertirse en gobernador, se vio envuelto en otro escándalo de corrupción. Al parecer, el gobernador había estado envuelto en financiaciones ilegales a manos de la Federación de Comercio, y estaba enterado del plan de la Federación de invadir Naboo, pero le sobornaron para que no dijera nada, y a cambio, pudiera financiar su campaña con mucho más apoyo. Finalmente, este gobernador acabó dimitiendo, y volvió la crisis política. Con otra petición sin éxito del planeta de pedir ayuda a la República, se acabó separando, unido a otros planetas de la región como Raxus o Serenno, para que en el 24 ABY fuera uno de los 15 fundadores de la Confederación de Sistemas Independientes. Tras la salida de la República, el planeta consiguió prosperar, liberado así de la alta cuota anual que debía pagar como miembro de la República.
En este planeta nació Ruman Bleiz, hijo de Steplan Bleiz, una activista política separatista en contra de la República, que ganó apoyo durante la crisis política. Finalmente, consiguió alcanzar su objetivo en el 30 ABY, pero su alegría duraría poco, ya que fue asesinada un año después por una banda terrorista a favor de la continuación en la República. Su hijo, que hasta ahora apenas se había interesado por el trabajo de su madre, y que su sueño era ser piloto y servir en una flota estelar, decidió vengar la muerte su madre, se graduó en Legislación Senatorial, y solo 3 años después de la muerte de su madre, en el 26 ABY, se convirtió en el Gobernador Independiente de Rados. Sin embargo, después de ilegalizar la banda terrorista que mató a su madre, se dio cuenta de que paenas tenía interés por la política, por lo que en el 25 ABY, dejó su cargo para intentar graduarse para ser piloto. Sin embargo, no consiguió su objetivo, y en el 23 ABY, abandonó la academia. Entonces, volvió a su actividad política, aunque no le permitieron de nuevo el puesto de gobernador, por lo que acabó en el Ministerio Público del Ejército.
En esa nueva era, Bleiz se aficionó a la ciencia militar, y en un año se graduó como general. Sin embargo, las posibilidades de un conflicto bélico entre la República y los Separatistas era inmienete. Al principio de 22 ABY, fue citado por el Senado Separatista para ser el general numero 171 del los 221 que acabó habiendo. Nunca destacó a gran escala, y se puede decir que fue muy infravalorado. Eso es, porque la mayoría de los demás líderes separatistas creían que solo estaba allí por ser hijo de una famosa senadora, por lo que pensaron que apenas tenía talento.
Su primera batalla en la que tuvo que participar fue en la de Geonosis. Le encargaron a él dirigir el bloqueo a la flota de la República, para impedir que pudieran rtirarse y escapar del planeta, una vez iniciada la batalla. Sin embargo, debido a la poca confianza que tenían en él los demás líderes separatistas, le encargaron la parte fácil, es decir, una especie de semibloqueo en la estratosfera de Geonosis, menos efectivo que el que había ya en la exosfera. Aún así, su escuadrón fue capaz de abatir algunos tipos de comandos. Sin embargo, quizás su mayor victoria fue en la invasión de Felucia, cuando tuvo que hacer huir a los experimentados generales Jedi Anakin Skywalker, Obi Wan Kenobi, Plo Koon, y a la Comandante Ashoka Tano. Dirigió a distancia la victoria, y los Jedi se tuvieron que retirar. Aun así, esa victoria no le fue suficiente para conseguir una mayor reputación dentro de la Confederación.
Sin embargo, Bleiz nunca estuvo completamente de acuerdo con la Confederación. Le dolió en el alma que el general Lok Durn probara su nueva arma separtista intentando asesinar a los nativos de Maridun, entre otros genocidios. También desconfiaba de su jefe, Dooku, con el cual solo había cotactado de forma holográfica. Su voz no le inspiraba confianza. Él se describía así mismo como un idealista, y un apasionado de la ciencia militar, no un genocida. Su objetivo era una galaxia mejor, en la que todos los planetas tuvieran una importancia similar, estuvieran donde estuvieran, y pidiendo una descentralización del poder del núcleo, además de ayudas a cualquier planeta que estuviera en crisis. Era un idealista. Confiaba más en la Confederación, porque le parecía que tenía mejor programa ideológico que la República, pero no defendía los ataques a la República, salvo que esta les hubiera atacado antes. En el 21 ABY, se le entregó el puesto de Senador Honrífico en el Senado Separatista por Rados, el cual rechazó debido a su actividad militar. Era un orgullo para su pueblo, según decían sus seguidores.
Después de múltiples batallas, estuvo a punto de ser destinado a Umbara, la que acabaría siendo una de las batallas más importantes de la Guerra, pero en el último momento fue sustituido y enviado a Tremban, otro planeta casi desértico del Borde Exterior, en el que la República había descubierto un laboratorio en el que se estaban experimentando superarmas separatistas. Sin embargo, el laboratorio estaba bajo tierra, y la República no sabía exactamente donde se localizaba, por lo que le era complicado destruir el laboratorio. En realidad, Bleiz sabía perfectamente que el laboratorio que supuestamente había descubierto la República, había sido cerrado tras la Batalla de Geonosis, y los asedios de la República continuos a los demás planetas del Borde Exterior. Las superarmas habían sido evacuadas, salvo una, que había quedado olvidada en funcionamiento. Entonces la República había descubierto una absoluta concentración de iones bajo tierra en el planeta, lo cuál le había hecho suponer lo peor. Para cuando Ruman llegó a la base separatista en la capital, la República ya había empezado a bombardear 7 ciudades del planeta, con el objetivo de bloquear la entrada del laboratorio, ya que la República suponía que el laboratorio se encontraba bajo tierra, y las salidas del laboratorio se encontraban en distintos lugares de las ciudades. Sin embargo, la fallida teoría se tradujo en miles de civiles asesinados por los bombardeos. Ruman, entonces, intentó avisar a la flota separatista de que la República estaba bombardeando Tremban, y pidió una mínima flota, pero estos rechazaron, ya que los separatistas tenían otros problemas más urgentes en Umbara.
Entonces, a Ruman se le ocurrió una idea. Le pidió ayuda a un espía que tenía en la República, y le pidió que le consiguiera el código para contactar con el crucero de la República Venator 23-x-52, el que dirigía el ataque. Este se lo consiguió, pero a su vez, le informó de que la República estaba dispuesta a soltar gases tóxicos y acabar con toda forma de vida posible en el planeta, si no encontraba la puerta de entrada al laboratorio, para así iniciar una invasión y hacerse con las superarmas, en definitiva, todo un genocidio. Pero la República no quería destruir las superarmas, sino usarlas ellos para su propio beneficio. Es entonces cuando Bleiz se vistió igual que un oficial de la República, y contactó holográficamente con el crucero Venator, gracias al código que su amigo le había dado. En este, Ruman, haciendose pasar por oficial de la República, informó al crucero de que el laboratorio había sido descubierto y no era una amenaza, había sido cerrado desde hace 2 años, y no se debía seguir con el ataque. Ruman esperaba que no le creyeran a la primera, pero increíblemente si que le creyó el almirante a cargo del crucero y tras consultarlo con Yularen, abandonó el planeta. El lugar quedó devastado tras los bombardeos, pero podría haber quedado sin vida completamente, de haber sido liberados los gases tóxicos que tenía pensado la República esparcir. Bleiz había conseguido expulsar a la República de un territorio, sin guerra, con diálogo, y pese a falsificar su puesto, no mintió en lo que dijo, bueno, desde cierto punto de vista.
Ruman contó en Rados toda la historia, y fue recibido en su pueblo como un héroe, por salvarle la vida a los 100 millones de residentes de Tremban, y por evitar que la República se hicera con ese superarma que se habían olvidado los separatistas. En Tremban, el Gobernador le nombró Hombre del año. Sin embargo, los separatistas le reprocharon no haber utilizado el ejército de droides que tenía a su disposición para atacar a la República, y no dejar que escaparan, pero a Ruman no le importó, ya que había hecho lo mejor que pudo haber hecho. Después no tuvo muchas tareas de importancia durante la guerra. Dirigó algún que otro asedio, pero nada al nivel de lo que hizo salvando Tremban del genocidio, y de una forma pacífica.
Al final de la Guerra, en el 19 ABY, durante los Asedios del Borde Exterior, la República asedió Rados. Por petición propia, Bleiz quiso defender su mundo de la república y dirigió el ejército de droides. A Bleiz le dolió que atacaran su mundo, uno de los más pacíficos de la Confederación, pero se defendió firmemente. Durante la batalla, tres Generales Jedi lideraron todos los ataques hacia la capital, la mayoría con éxito. A mitad de la batalla, Ruman recibió la noticia de que Grievous había secuestrado a Palpatine con éxito, y que la República se concentraría en Coruscant, dejando libre a los mundos del Borde Exterior. Sin embargo, en Rados solo un pequeño grupo de la legión de clones, dejaron el planeta para dirigirse a Coruscant, encabezados por una Maestra Jedi, por lo que los Generales Jedi bajaron de 3 a 2. Aun así, el ataque prosiguió. Más tarde recibió la noticia de que Palpatine había sido rescatado y más tarde que Grievous había sido destruido. Sin embargo, su mayor sorpresa fue cuando observó como los clones asesinaban a sus dos generales Jedi, depués de una trasmisión de un hombre encapuchado. Aun así, los clones, cada vez más efectivos, fueron avanzando cada vez más, y finalmente atacaron la capital. Ruman fue apresado. Cuando estaba detenido, en su celda, oyó a un clon hablar con ese mismo encapuchado, diciendo: "¿Qué hacemos con él, Mi Lord?" Y este, con una voz muy extraña, diría "Matade". Y con un disparo de un comandante clon terminó la historia de Ruman Bleiz.
Rados fue invadido por el recien creado Imperio después de la muerte de Bleiz. Durante esta época, la desinformación aumentó. Bleiz acabó descansando en fosas comunes. Cuando el Imperio cayó, la Nueva República llevó a cabo un proceso de descentralización, añadiendole importancia a los mundos del Borde Exterior. Entonces, la última gobernadora de Rados antes del final de la Guerra, que había sido condenada a muerte, y más tarde indultada y condenada a cadena perpetua, contactó con la República para contarle la historia de Ruman Bleiz. Se propusieron hallar el cuerpo abandonado de Bleiz, pero probablemente ya solo quedarían huesos, por lo que se le hizo una estatua en Rados, y pese a que había luchado contra la República, esta le rindió honores por haber evitado uno de los peores genocidios de la historia de la galaxia.
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